Conmemoran hechos acaecidos en 1968 en México.
Los mexicanos recordaron ayer la matanza estudiantil cometida hace 51 años por el Gobierno en la plaza de Tlatelolco, con actos conmemorativos en la capital del país.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se deslindó de los “hechos lamentables” del 2 de octubre de 1968, una época marcada por “la falta de libertades y de justicia”, y reivindicó que en su administración “el uso de la fuerza ha quedado relegado”.
“Queremos vivir en una sociedad en paz, sin violencia, sin usar la fuerza, convencer y no vencer, vivir en armonía, vivir en paz. Por eso, nunca más una represión en México, nunca más torturas, desapariciones, masacres o provocaciones”, expresó el mandatario.
Por su parte, la jefa de Gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, durante un acto conmemorativo destacó el legado que dejó la masacre en su vida y en la de todos los mexicanos.
“Nos marcó en la idea de la lucha de la libertad y la democracia y en que jamás hay que utilizar las fuerzas del Estado para reprimir”, expresó en su discurso.
Sheinbaum aseguró que los caídos ese día “siguen inspirando” al Gobierno de Ciudad de México para “seguir luchando por la democracia, por la no represión”.
La alcaldesa rememoró su infancia, en la que su madre, profesora y partícipe del movimiento estudiantil, la llevó con 8 años a la penitenciaría conocida como el Palacio de Lecumberri a visitar a algunos de sus compañeros de lucha.
Durante el verano de 1968, miles de estudiantes organizaron huelgas y masivas manifestaciones para denunciar el autoritarismo del Gobierno mexicano, dominado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que reprimió la movilización para evitar altercados durante los juegos olímpicos de ese año.
El movimiento fue aplastado militarmente el 2 de octubre de 1968, cuando el Ejército y el grupo paramilitar Batallón Olimpia disolvieron a disparos un mitin estudiantil en la plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco, en el centro de Ciudad de México, matando a centenares de personas, según testigos.
Cada año, supervivientes de la masacre y organizaciones estudiantiles realizan una marcha desde Tlatelolco hasta la céntrica plaza del Zócalo, para conmemorar la masacre.