Esfuerzos deben enfocarse más en la protección de la niñez, dice UNODC.
Las Naciones Unidas y funcionarios gubernamentales de Centroamérica alentaron a reforzar las acciones para combatir la trata en la región, para lo cual ven importante la cooperación entre países del Istmo.
Este delito ha existido toda la vida, y por eso todos los territorios del área pueden tener víctimas de ese flagelo, indicó Lourdes Gutiérrez, coordinadora regional del Proyecto de Trata de Personas y Tráfico de Migrantes, de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés).
Los menores de edad son los más vulnerables a ese mal en Centroamérica, un problema poco denunciado pese a ser considerado el tercer negocio ilícito más rentable del mundo, agregó.
Los niños son “más vulnerable” a la trata porque “son los que menos denuncian. Algunos ni hablan; entonces alguien más tiene que decir lo que está sucediendo”, subrayó la funcionaria.
Gutiérrez, quien participó esta semana en Tegucigalpa, Honduras, en la presentación de una campaña contra la trata, indicó que la estrategia más común para reclutar a las víctimas es la utilización de las redes sociales, por lo que instó a “informarse, denunciar” y autoprotegerse.
Por su parte, la ministra hondureña de Derechos Humanos, Karla Cueva, dijo que la trata es un delito de “criminalidad organizada” y una “grave violación” a los derechos humanos.
La funcionaria abogó por un “esfuerzo articulado” para luchar contra la trata, e instó a las familias a prevenir que los menores de edad sean “víctimas fácil” de ese flagelo.
Destacó la importancia de identificar los lugares, principalmente las zonas turísticas, donde los menores y las mujeres son “más vulnerables” al tráfico de personas.