Finalmente, el 25 de febrero de 1951, casi una década después, se oficializó el comienzo de los Juegos Panamericanos, en Buenos Aires, como se había acordado. En la primera edición participaron 2 mil 500 atletas de 22 países, y Argentina fue el ganador.
Un año antes de aquel domingo 25 de febrero de 1951, se habían realizado los VI Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe en Guatemala, los cuales, sin habérselo propuesto, fueron el mejor entrenamiento para Guatemala en su preparación para participar en eventos mayores en el futuro.
En Buenos Aires, el acto inaugural se llevó a cabo en el Estadio Presidente Perón y fue precisamente el presidente Juan Domingo Perón y su esposa Eva quienes hicieron la declaratoria inaugural de los Primeros Juegos Deportivos Panamericanos.
El atleta griego Arístides Roubanis fue quien acompañó el fuego panamericano desde Olimpia, Grecia, en un vuelo especial de la empresa Argentina de Aviación, y fue él quien tuvo a su cargo encender el primer pebetero panamericano.
Los Juegos Panamericanos vienen a ser una especie de versión continental de los Juegos Olímpicos, al grado que en los mismos se incluyen disciplinas de las categorizadas como olímpicas y otras sugeridas y aprobadas por la Organización Deportiva Panamericana, ODEPA, y la mística de estas justas es propiciar la unidad entre los pueblos, llevar un mensaje de paz y demostrar el potencial físico atlético, la destreza y arrojo de la juventud americana.
Por: Enrique Bremermann