Cuatro incendios forestales declarados en el distrito de Castelo Branco, en el centro de Portugal, movilizan hoy a medio millar de operativos para controlar las llamas, que obligaron a varias evacuaciones por precaución y provocaron cuatro bomberos heridos.
La Autoridad Nacional de Protección Civil lusa informó en rueda de prensa que las llamas, que afectan a los municipios vecinos de Sertã y Vila de Rei -a unos 170 kilómetros al norte de Lisboa-, han dejado tres bomberos heridos leve y uno más grave.
Además, se han evacuado a 60 personas que estaban en una playa fluvial de la zona y una aldea -aunque no en su totalidad, dando prioridad a personas de movilidad reducida- “por prevención”.
Los fuegos, en los que trabajan casi una quincena de medios aéreos, también han provocado el corte de dos carreteras nacionales y una municipal.
El pronóstico de cuándo podrán ser controlados los incendios es “complejo”, informó Protección Civil, ya que al encontrarse en la misma zona “están interactuando entre sí”.
De los cuatro incendios preocupan especialmente dos de mayores dimensiones, uno en Vila de Rei y otro en Sertã, población en la que arden otros dos focos.
Protección Civil alertó el pasado jueves de que la subida de temperaturas y la disminución de la humedad previstas para este fin de semana aumentaba el peligro de incendios forestales, por lo que pidió a la población que tomase precauciones.
El Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera colocó este sábado a diecinueve municipios de seis distritos del país, entre ellos Castelo Branco, en riesgo máximo de incendio. Lisboa, EFE