Francia, Italia y Bélgica se imponen.
Alemania vapuleó ayer a Estonia por 8-0 en un partido en el que incluso tuvo ocasiones para conseguir una goleada más abultada y en el que el mejor de los estonios fue el portero Sergei Lepmets.
Lo que se esperaba que fuera un típico partido de paciencia y constancia para Alemania, se convirtió muy pronto en una fiesta goleadora frente a un rival que no encontró la fórmula para detener la aplanadora teutona.
La apuesta estonia era encerrarse en su propia área para mantener el 0-0 el mayor tiempo posible y buscar posibilidades de contragolpe con balones largos para Sergei Zenjov, su único hombre en punta.
En el minuto 10 llegó el primer gol alemán por medio de Marco Reus, quien remató dentro del área pequeña un centro de Thilos Kehrer desde la derecha.
En el 16, Serge Gnabry aumentó la cuenta, a puerta vacía y a pase de Leroy Sané dentro del área pequeña. El tercero llegó en el minuto 20, con un remate de cabeza de Leon Goretzka a centro de Joshua Kimmich. En el 26, Gundogan hizo el cuarto de penal y en el 37 Reus, de falta directa, firmó el quinto.
Los equipos se fueron al descanso con el partido ya resuelto y Alemania había tenido ocasiones para uno o dos goles más que no llegaron por buenas intervenciones del meta estonio Lepmets, que, entre otras paradas, desvió contra el larguero un disparo de Reus desde fuera del área.
En la segunda parte la tónica siguió siendo la misma. A Alemania le alcanzó para 3 goles más, obra de Gnabrut en el minuto 62 a centro de Marcel Halstenberg desde la izquierda, Timo Werner en el 79 a un pase de profundidad de Julian Draxler y Sané en el 88 con un remate con la zurda.
Itálicos, galos y belgas responden
Italia remontó a la de Bosnia y triunfó 2-1 en Turín en la cuarta jornada del Grupo J, lo que le permitió seguir con el pleno de puntos y mantener su paso firme hacia la clasificación, gracias a los goles de Lorenzo Insigne y Marco Verrati, que revirtieron la anotación previa de Edin Dzeko.
Bélgica dio un paso de gigante hacia la Eurocopa al derrotar a una compacta Escocia (3-0) con un doblete de Romelu Lukaku y guinda final de Kevin de Bruyne que confirmaron la ventaja en el liderato de los diablos rojos.
Francia recuperó el pulso al Grupo H y consiguió una victoria fácil y balsámica contra Andorra, que no fue rival para un equipo que ganó 0-4 con un gran gol de Kylian Mbappé y con los tantos de Wissam Ben Yedder, Florian Thauvin y Kurt Zouma.