Casos como el tiroteo en el que ayer resultó herido un adolescente en Homestead, es el centro de la nueva política del condado Miami-Dade, que activó un toque de queda para proteger la vida de menores de 17 años, como parte del Grupo de Intervención contra la Violencia (GVI).
Para informar del toque, la promotora de la medida, la presidenta de la Comisión de Miami-Dade, Audrey M. Edmonson, sugirió la instalación de vallas publicitarias tras varios tiroteos durante el fin de semana, que dejaron cuatro muertos.
Según la comisionada, se trata de una ordenanza existente que no se estaba aplicando en el condado y que busca proteger a menores de la violencia con armas, como el menor tiroteado la madrugada de ayer frente a su casa, en Homestead, quien se encuentra “estable”, según el parte médico. Miami, EFE