El equipo holandés, a semis de la Champions.
El Ajax, con otra obra maestra de futbol, técnica y organización, triunfó por 1-2 ayer en el campo de la Juventus, y volverá a jugar una semifinal de la Liga de Campeones 22 años después, pese a recibir un gol del portugués Cristiano Ronaldo, que fue destronado después de 3 años consecutivos como rey de Europa.
CR7 adelantó a la Juventus a la media hora, con otra prueba de su contundencia ofensiva, pero el futbol del Ajax terminó premiado por los goles de los holandeses Donny Van De Beek y de Matthijs De Ligt, y regaló a los hijos de Johan Cruyff otra proeza como visitante, después del 1-4 logrado en octavos contra el Real Madrid, en el Santiago Bernabéu.
Después del 1-2 de De Ligt, el Ajax se agigantó en Turín, brilló impulsado por el serbio Dusan Tadic, el marroquí Hakim Ziyech y el brasileño David Neres, e hizo méritos para irse del Juventus Stadium con un resultado mucho más abultado.
Fue una fiesta para los hombres del técnico holandés Erik Ten Hag, que no llegaban tan lejos en la Copa de Europa desde la temporada 1996-1997. Su sueño europeo sigue, al imponerse a dos colosos como el Real Madrid y el Juventus.
Fue un golpe psicológico para la Juventus, cuya reacción fue más impulsada por el nerviosismo que por la atención táctica. Y el Ajax seguía fiel a su tradición: el juego.
Disgusto
A base de talento, organización y técnica, el equipo de Ten Hag apenas sufrió defensivamente y creó grandes oportunidades de gol a lo largo del enfrentamiento.
Para la Juve fue un disgusto tremendo, pues ni siquiera supo cautivar a su afición para que permaneciera en sus butacas hasta el final del choque.
La imagen final de la derrota fue la tarjeta amarilla a Cristiano, visiblemente frustrado.