Londres – EFE
Acabado el monopolio del Real Madrid en Europa, el próximo rey destinado recoger la corona del campeón podría ser inglés. La pérfida Albion ha colocado a cuatro de cuatro equipos en cuartos de final de la Liga de Campeones, aspirando a un título que no huelen desde 2012.
La clasificación de Manchester United, Manchester City, Tottenham Hotspur y Liverpool marca la vuelta del futbol inglés a la máxima competición continental después del ostracismo de los últimos años.
Los ingleses no metían a cuatro equipos en cuartos desde la temporada 2008/2009, cuando Chelsea, Liverpool, United y Arsenal lograron colarse entre los ocho mejores de Europa.
Pese a que tres de ellos darían el paso hasta semifinales, no hubo campeón inglés y el Barcelona, liderado por Leo Messi, venció a los diablos rojos en la final de Roma.
Luego de aquel año, el balompié inglés ha perdido paulatinamente su protagonismo, reduciendo el número de equipos en cuartos y con la excepción del Chelsea de Avram Grant que se proclamó campeón en 2012.
En 2010, Inglaterra metió 2 equipos (Arsenal y United); en 2011, 3 (Chelsea, United y Tottenham); en 2012, solo pasó el, a la postre, campeón, el Chelsea; en 2013 y 2015, ninguno logró el billete a cuartos; en 2014, Chelsea y United estuvieron entre los 8 mejores; en 2016 y 2017, City y Leicester, respectivamente, marcaron la presencia británica en cuartos y la campaña pasada Liverpool y City se batieron por un puesto en semifinales.
Para explicar esta revitalización, hay que mirar al dominador de la competición los últimos cinco años. España, con cuatro títulos del Real Madrid y uno del Barcelona, ha mimado la Champions desde que el Bayern Munich venciera al Borussia Dortmund en 2013.