Nicaragua instaló una nueva mesa de negociaciones para superar la crisis sociopolítica que vive desde abril de 2018, para la que la Organización de Estados Americanos (OEA) se ofreció como garante.
La instancia se estableció entre el Gobierno y la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, sin la participación del presidente Daniel Ortega ni su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, como lo hicieron en un primer intento fallido.
Las partes aprobaron una hoja de ruta que será la normativa del funcionamiento de la negociación. Managua, ACAN-EFE
