Michelle Bachelet denuncia excesivo abuso de las fuerzas de seguridad.
La alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, condenó ayer el excesivo uso de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad venezolanas y grupos progubernamentales en las fronteras de Venezuela con Colombia y Brasil, que dejó unos cuatro muertos.
Los episodios violentos del viernes y el sábado, en los que también hubo más de 300 heridos, han mostrado “escenas deplorables”, subrayó en un comunicado la expresidenta chilena, quien pidió al Gobierno venezolano que “deje de emplear el uso excesivo de la fuerza contra manifestantes desarmados y ciudadanos comunes”.
La alta comisionada también pidió al régimen del presidente Nicolás Maduro que frene a los grupos progubernamentales involucrados en los incidentes violentos, muchos de ellos relacionados con el bloqueo de la asistencia humanitaria que se dirigía hacia el interior de Venezuela.
“El uso de fuerzas paramilitares o parapoliciales tiene una larga y siniestra historia en la región, y es muy alarmante verlas operar de manera tan clara en Venezuela”, señaló Bachelet, quien llamó nuevamente al Gobierno venezolano a impedir “que estos grupos sigan exacerbando una situación ya de por sí altamente inflamable”.
Morales pide que dejen entrar la ayuda
El Presidente de Guatemala, Jimmy Morales, condenó este sábado la “violencia en las fronteras” de Venezuela y le exigió a Nicolás Maduro que deje entrar la ayuda humanitaria. “Guatemala condena la violencia en las fronteras de Venezuela y se une al llamado internacional para exigirle al régimen de Maduro que permita el ingreso de la ayuda humanitaria para el pueblo venezolano”, dijo Morales en sus redes sociales.
La ayuda humanitaria fue solicitada por el jefe del Parlamento, Juan Guaidó, quien se autoproclamó en enero presidente encargado de Venezuela al considerar a Maduro un “usurpador”, y fue reconocido por unas 50 naciones, entre ellas Brasil y Estados Unidos.