Estados Unidos se alista para cinco días de intenso consumo en torno al Viernes Negro o Black Friday, pues se calcula que 164 millones de personas irán a tiendas, en unas jornadas de fuertes descuentos que han importado otros países y que inaugura la temporada navideña para el comercio minorista y online.
Aunque el pistoletazo de salida es la festividad de Acción de Gracias, que se celebra cenando el tradicional pavo asado con los allegados, el cuarto jueves de noviembre, ya hay rebajas pre-Black Friday en Amazon, una de las grandes firmas protagonistas.
La fiebre de las compras, no obstante, se dispara cuando llegan los descuentos más jugosos, entre ese jueves y el Ciberlunes (Cyber Monday), que acotan el Viernes Negro y el Sábado de las Pequeñas Empresas, y por los que muchos consumidores están dispuestos a esperar.
Según la Federación Nacional de Minoristas, unos 164 millones de personas en EE. UU. planean ir de compras esos 5 días, “ya sea después de acabarse el pavo u ‘online’ en el Ciberlunes”, demanda para la que el comercio estará listo, afirmó en un comunicado su principal responsable, Matthew Shay.
La entidad NRF hizo una encuesta a 7 mil 500 personas, y la mayoría encontró en “las ventajas de los descuentos” su principal razón para ir de compras. Nueva York, EFE
