La Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema salvadoreña ordenó ayer que el presidente Salvador Sánchez Cerén declare ante un juez, para esclarecer la desaparición del embajador de Sudáfrica, Archibald Gardner Dunn, en 1979, a manos de la organización guerrillera que el ahora mandatario dirigió durante la guerra civil.
“En el presente caso deberá considerarse como sujeto demandado al señor Salvador Sánchez Cerén, en su calidad de particular, como miembro de las Fuerzas Populares de Liberación, según lo determina el demandante”, indicó el órgano judicial.
El diplomático fue secuestrado el 28 de noviembre del año citado en la capital salvadoreña, y las Fuerzas Populares de Liberación enviaron un comunicado a la prensa en el que daban a conocer el asesinato del funcionario sudafricano, pero no relevaron el paradero de sus restos.
Dunn fue secuestrado cuando salía de la Embajada, y luego el grupo guerrillero exigió US$2 millones. San Salvador, ACAN-EFE