La Embajada de Estados Unidos en Israel se inauguró ayer en Jerusalén, a la misma hora que en hace 70 años se proclamaba en Tel Aviv (donde estaba hasta ahora dicha sede diplomática) el Estado de Israel.
La decisión desencadenó una oleada de protestas en la Franja de Gaza, donde 52 personas murieron ayer y otras 2 mil resultaron heridas en incidentes violentos con el Ejército israelí, que abrió fuego contra la multitud que se acercaba a la valla de separación con Israel.
Protestas
Más de 40 mil personas tomaron parte ayer en la conocida como Gran marcha del retorno, que desde el 30 de marzo pasado ha sido convocada durante 7 viernes consecutivos, así como los días 14 y 15 de mayo, para protestar contra el traslado de la embajada y reclamar el regreso de los refugiados palestinos. “En nombre del 45 presidente de los Estados Unidos de América (Donald Trump), os damos la bienvenida oficialmente, por primera vez, a la Embajada de Estados Unidos aquí en Jerusalén, la capital de Israel”, declaró la hija del mandatario, Ivanka Trump, al desvelar la placa en la que, hasta ahora, fue sede consular estadounidense.