La roquera Patti Smith estrenó ayer documental en el Festival de Cine de Tribeca, y aprovechó la ocasión para brindar un breve concierto, al que se sumaron sus amigos Bruce Springsteen y el líder de la banda R.E.M., Michael Stipe.
Ícono punk
“Jesús murió por los pecados de alguien, pero no por los míos”. Así comienza Horses (1975), el disco debut de la cantante Patti Smith que da nombre al nuevo documental, dirigido por Steven Sebring. El filme muestra los conciertos que la roquera dio en Los Ángeles con motivo del 40 aniversario del álbum que la encumbró, así como los entresijos del backstage.
La artista tocó algunos de sus himnos, como la canción con la que arranca el disco, Gloria (In Excelsis Deo), una versión del tema de Van Morrison a la que en 1975 añadió versos inéditos que extrajo de sus poemas. Esas líneas, que hacían referencia a Jesús, escandalizaron a los más puritanos, que no podían creer que una muchacha criada en una familia de Testigos de Jehová pudiera blasfemar así.
Una vez acabó el instituto, Smith se incorporó en una fábrica, un trabajo que detestaba y que inspiró sus primeras canciones, y poco después dio a luz a una niña a la que entregó en adopción en 1967. Ese mismo año abandonó Nueva Jersey y se mudó a Manhattan, donde conoció al “artista de su vida”, el fotógrafo Robert Mapplethorpe, quien la retrató para la portada de Horses.
La grabación del álbum fue un “infierno”, según Smith. Sin embargo, a los 71 años puede alardear de haber compuesto verdaderos himnos del punk y haber dejado su huella en artistas de la talla de U2, R.E.M, The Smiths, Sonic Youth y Madonna.
- Sergi Santiago, EFE.