La gimnasia guatemalteca perdió ayer a uno de sus principales forjadores de atletas y conquistas, con la muerte del entrenador Sergio Tejeda, de 70 años, a causa de un infarto, según fuentes.
Con el perecimiento de Tejeda se desaparece un revolucionario del deporte, que hizo del antigüeño Jorge Vega un campeón y lo posicionó en la palestra del ámbito mundial con victorias inéditas.
Conocido por su espíritu guerrero por haber superado el cáncer que le afectó en 2015, Tejeda se inició en el beisbol, practicó luchas, hasta descubrir su amor por la gimnasia.
A pesar de que físicamente ya no acompañará a Vega, sus rutinas quedaron inmortalizadas con el gimnasta y seguirán reflejadas con su ingreso al Olimpo.
Sus conocimientos influenciaron en Vega, quien se catapultó a la élite al lograr las medallas de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 2014 y la dorada de los Panamericanos de Toronto 2015.
Además, llevó al Pequeño Gigante a conquistar 4 preseas en Copas del Mundo, entre ellas la de oro en París, Francia, y situarlo en el quinto lugar en el Mundial, en Montreal, Canadá.
La presea más reciente alcanzada con su discípulo fue en los Juegos Bolivarianos Santa Marta, en 2017.
