George Papadopoulos, un asesor de la campaña electoral de Donald Trump, reconoció que se reunió con funcionarios rusos en Londres, en marzo de 2016, para acordar reuniones entre ambas partes y obtener datos sucios sobre la excandidata Hillary Clinton.
Según el testimonio, dialogó con una mujer a la que describió como sobrina del presidente Vladimir Putin, así como con el embajador moscovita en la capital británica.
Lo que se sabe
Un mes después, reportó que su contacto ruso, un profesor del que no se proporciona nombre, le había proporcionado datos sobre la rival demócrata del gobernante en la carrera presidencial, incluidos “miles de correos electrónicos”, según la inculpación.
En un acuerdo de culpabilidad, introducido el 5 de octubre y divulgado ayer, Papadopoulos se declaró culpable de mentir a los investigadores en enero, buscando esconder los alcances de sus contactos con los rusos.
“Por medio de sus falsas declaraciones y omisiones, el acusado Papadopoulos impidió la investigación en curso del Buró Federal de Investigaciones sobre la existencia de vínculos o coordinación entre individuos asociados con la campaña y los esfuerzos del Gobierno ruso para interferir con las elecciones presidenciales de 2016”, subrayó la acusación firmada por el fiscal especial, Robert Mueller. La acusación formal y la declaración de culpabilidad de Papadopoulos fueron reveladas ayer poco después de que el exjefe de la campaña de Trump, Paul Manafort, y su socio comercial Rick Gates fueran acusados de conspiración contra Estados Unidos, lavado de dinero y declaraciones falsas, informó el ente pesquisidor.