El presidente de la Juventus, Andrea Agnelli, fue condenado a 1 año de suspensión y 20 mil euros (Q173 mil 800) de multa por un caso de venta de entradas a grupos ultras, anunció ayer la Federación Italiana de Futbol (FIGC).
Otros 3 dirigentes del campeón italiano recibieron la misma pena, mientras que el club deberá pagar una multa de 300 mil euros (Q2 millones 607 mil) por la venta de estas entradas a grupos en los que estaban infiltrados miembros de la N’Dragheta, la mafia calabresa, que luego vendían los pases mucho más caros.
El fiscal del tribunal deportivo había solicitado 2 años y medio de suspensión y la extensión del castigo a nivel europeo para Agnelli, quien acaba de ser elegido presidente de la Asociación Europea de Clubes. Para la Juventus pidió 2 partidos a puerta cerrada más la multa.
Este proceso ante la Justicia deportiva sigue una investigación abierta por la Fiscalía de Turín, relativa a la venta de entradas por parte de la Juventus a los grupos ultras, entre los que se habría infiltrado la N’Drangheta.
El abogado del presidente de la Juventus pidió calma y anunció a la prensa que presentarían un recurso.
La Justicia deportiva señala a la Juventus por haber cedido a los grupos ultras lotes completos de entradas, cuando solo está autorizada a vender cuatro al mismo tiempo. Milán, AFP