El poderoso huracán Irma, de violencia inédita, avanzó ayer hacia República Dominicana, Cuba y Florida, tras dejar al menos cinco muertos y una estela de destrucción en su recorrido hacia el oeste del Caribe.
Con ráfagas de viento que superaron los 300 kilómetros por hora, el ciclón de categoría 5, la más alta, dejó al menos 4 muertos en la isla franco-holandesa de San Martín, anunció el primer ministro francés, Edouard Philippe.
Una quinta víctima fue registrada en Barbuda, una isla vecina de mil 600 habitantes, que, según su primer ministro, Gaston Browne, quedó devastada.
En Anguila y las Islas Vírgenes británicas, Irma causó daños catastróficos, indicó el ministro de Relaciones Exteriores del Reino Unido, Boris Johnson. “Es casi como estar en un país en guerra”, afirmó una periodista local, Maeva Myriam Ponet.
Relato
En San Bartolomé, una isla francesa de 10 mil habitantes, estos despejaron calles, en medio de vehículos volcados, postes de luz y hoteles inundados.
Irma es el ciclón de intensidad 5 más largo jamás registrado en el mundo, afirmó el servicio meteorológico francés, superando al supertifón Haiyan, que en 2013 había generado en Filipinas los mismos vientos.
Es también más fuerte que Harvey, que golpeó recientemente Texas y Luisiana, en el sur de Estados Unidos.
“Las destrucciones son masivas”, lamentó el ministro del Interior francés, Gérard Collomb. El sistema avanza rumbo a República Dominicana, Haití y Cuba, una ruta que debería llevarlo a Florida (Estados Unidos).
“La mayor parte de la gente a lo largo de la costa estadounidense nunca ha experimentado un huracán como este. Será realmente devastador, alertó Brock Long, director de la Agencia de Gestión de Emergencias (FEMA), quien indicó que Estados Unidos ha sido azotado por huracanes categoría 5 tan solo en 3 ocasiones desde 1851.