En su segundo partido de pretemporada, un activo FC Barcelona, liderado por Leo Messi y Neymar, se impuso a un espeso Manchester United, en el que solo sobresalió el portero español David de Gea con sus espectaculares intervenciones.
En el choque, jugado a un ritmo muy bajo, se vio que ambos equipos aún necesitan recorrido para alcanzar su forma de juego, pero mostró la apuesta decidida y abierta de Ernesto Valverde y reiteró el espíritu oscuro y defensivo del conjunto inglés dirigido por José Mourinho.
El primer tiempo fue de dominio absoluto del Barcelona, con multitud de oportunidades, la mayoría salvadas por De Gea, especialmente frente a un poco acertado Luis Suárez, o por el poste, como en el caso de un disparo de Messi.
El gol llegó con la clásica arrancada del astro argentino en el centro del campo en el minuto 30, quien cedió al vacío para Neymar, y este, luego de un rebote en el área pequeña, colocó el balón en la esquina, fuera del alcance de De Gea. El brasileño, de quien ha habido rumores sobre su posible marcha al PSG, reiteró su olfato de gol, después de marcar los dos del triunfo contra la Juventus. Landover, EFE