Una ola de ciberataques golpeó de forma simultánea a empresas y servicios públicos en Ucrania y Rusia, y se propagó a multinacionales de otros países, recordando el modus operandi de las arremetidas extorsivas de mayo.
La incursión, que comenzó contra compañías ucranianas y la petrolera rusa Rosneft, afectó luego a otras firmas globales como el transportista marítimo danés Maersk, el grupo británico de publicidad WPP, el francés Saint-Gobain y el laboratorio farmacéutico estadounidense Merck, según fuentes de esas entidades.
El virus “se propaga en el mundo entero, un gran número de territorios se vieron afectados”, avisó en Twitter Costin Raiu, investigador de la empresa de seguridad informática rusa Kaspersky.
Todavía no se ha establecido ningún vínculo oficial entre esos diferentes ataques, pero, según diversas compañías afectadas, una petición de rescate de US $300 (Q2 mil 199) aparecía en la pantalla de las computadoras.
Según Kaspersky, aunque estas dos naciones son las más afectadas hasta ahora, también fueron víctimas el Reino Unido, Alemania, Italia, Francia y Estados Unidos. “Parece ser un ataque complejo, que usa diversos vectores para propagarse por las redes de las compañías”, afirmó la fabricante de antivirus.
