Una juez española decretó ayer prisión incondicional para el expresidente del Barcelona, Sandro Rosell, sospechoso de haber cobrado comisiones ilícitas de la venta de los derechos televisivos de la Selección brasileña de futbol, informó el tribunal.
Imputación
Detenido el martes en Barcelona, Rosell declaró ante una magistrada de instrucción de la Audiencia Nacional de Madrid por sospechas de presunto blanqueo de 15 millones de euros (Q123.15 millones) junto al expresidente de la Confederación Brasileña de Futbol (CBF), Ricardo Teixeira, quien no está acusado.
La juez Carmen Lamela decretó la “prisión provisional comunicada y sin fianza” para el exdirectivo por el riesgo de fuga, de destrucción de pruebas y de reiteración delictiva, argumenta en el auto difundido ayer por la Audiencia.
La magistrada dijo sospechar que Rosell, junto a su cónyuge y tres testaferros detenidos el martes, cometió delitos de blanqueo de capitales y de pertenencia a una organización criminal.
Comisiones ilícitas
Esta trama “se dedicó a blanquear dinero procedente de comisiones ilícitas, derivadas de la venta por parte de Ricardo Teixeira, de los derechos” de la verdeamarela, señaló la juez.
Las indagaciones se centran en un contrato firmado en 2006 con una sociedad domiciliada en las Islas Caimán, pero vinculada al grupo saudí Dallah Albaraka, para ceder los derechos de difusión de 24 partidos amistosos de la canarinha.
Repartieron el botín
En el contrato se “impuso a la compradora el pago de unos fondos de los que en beneficio se apoderaron Rosell y Teixeira”, afirmó la magistrada Lamela en el auto dictado.
“De esta forma, Teixeira recibiría un total de 8 millones 393 mil 328 euros (Q68.9 millones) y Rosell 6 millones 580 mil euros (Q5.4 millones), en ambos casos sin conocimiento de la CBF y en su perjuicio”, añadió la juzgadora.