Agentes antimotines venezolanos lanzaron bombas lacrimógenas para dispersar pequeñas concentraciones de opositores en Caracas, impidiéndoles confluir en una marcha convocada contra el presidente Nicolás Maduro.
En el oeste de la capital, donde el miércoles hubo disturbios en una multitudinaria movilización, se dieron escaramuzas en los sectores de Santa Mónica y El Paraíso, donde se habían concentrado decenas de personas.
“Aproximadamente 100 nos estábamos concentrando, nos lanzaron gases lacrimógenos, disolviendo la manifestación que ni siquiera estaba obstaculizando el tránsito. Esto no va a poder con nosotros. Vamos a reagruparnos y a seguir”, advirtió el dirigente universitario Hasler Iglesias, en Santa Mónica.
En El Paraíso, el grupo se encontraba en la Av. O’Higgins cuando efectivos de la militarizada Guardia Nacional impidieron con gases que se reunieran los inconformes.
“Igual que ayer (miércoles), este es un tema de resistencia”, manifestó el diputado opositor Carlos Paparoni.