Escritores, editores y libreros guatemaltecos proponen universos infantiles inmersos en libros.
Abrir un libro infantil significa ingresar inmediatamente en un mundo desconocido que por los siguientes días se revelará en cada página. La imaginación se activa y con cada párrafo se construyen los personajes que dan vida a la historia. En ocasión del Día del Niño, y de la mano de escritores, editores y libreros guatemaltecos nos adentramos en textos infantiles en los que los más pequeños son protagonistas.
Vamos al espacio
Los protagonistas de Vamos al espacio, de Timothy Knapman y Wesley Robins, son dos hermanos que desean ser astronautas, y viajan en cohete, recorren las estrellas y se pasean por las constelaciones. Para Carolina Escobar Sarti, este libro integra a los niños y les plantea un reto: explorar y descubrir. Otros títulos que recomienda son La tierra de Juana, de Claude K. Dubois; y Li Min, una niña de Chimel, de Rigoberta Menchú y Dante Liano.
El monstruo de la Calle de Colores
En El monstruo de la Calle de Colores, Mario Payeras narra la historia de Flamarión Armarión, un monstruo que desarrolla una conexión con un grupo de niños. Carmen Lucía Alvarado, de Catafixia Editorial, dice que este es uno de sus libros infantiles favoritos, pues su protagonista es “enternecedor y poético”. También sugiere El país de los pájaros, de Luis Alfredo Arango, por ser “un canal directo a la magia de nuestra cosmovisión”.
Historias de nahuales y despojos
Para el premio nacional de literatura 2017, Francisco Alejandro Méndez, Historias de nahuales y despojos, de Lionel Méndez D’Avila, es “un viaje por el tiempo desde la voz de un niño que cuenta el Popol Vuh en una versión contemporánea”. El escritor y periodista también recomienda sumergirse en Árbol de pájaros y Ajonjolí, de Francisco Morales Santos, que ofrecen, afirma, un momento lúdico a los más pequeños.
La obra Dr. Seuss
Al pensar en Dr. Seuss a nuestra mente saltan El gato en el sombrero, El lórax, El Grinch y Horton, entre otros. El humor y las ilustraciones que resguarda la obra del autor estadounidense son para Javier Payeras “fundamentales”. “Comunica ideas de forma sencilla, poética y con unos versos rimados muy graciosos, que lo enlazan directamente con el humor infantil”. En esta línea, el escritor guatemalteco también destaca la serie de El Capitán Calzoncillos, de Dav Pilkey.
El sueño de Manuela
Philipe Hunziker, de Librería Sophos, elige El sueño de Manuela, de Cecile Baquey-Moreno. En este, una niña indígena anhela ir a la escuela, mientras trabaja para ayudar a su familia. El libro, dice Hunziker, muestra que muchos infantes hallan obstáculos para alcanzar sus sueños: “Pero, al mismo tiempo, tienen una gran voluntad y capacidad para superarlos. Para saber lo que significa ser niño en el país, hay que tener en cuenta las dos cosas”.