En el informe de seguridad ciudadana, que el Gobierno presentó a las autoridades electas, destaca el apartado sobre el combate al narcotráfico, el cual visibiliza los resultados que los ministerios de Gobernación (Mingob) y de la Defensa (Mindef) alcanzaron entre 2020 y 2023.
En síntesis, el documento concentra los golpes a los cárteles del crimen en dos rubros: decomiso de drogas, bienes y efectivo, y erradicación de plantaciones de marihuana, amapola y coca. El primero se cotiza en Q3.7 millardos, mientras que el segundo, en Q6.4 millardos, lo que supera los Q10.1 millardos.
Pero más allá de la cuantificación material, cuya importancia no puede cuestionarse, destaca los beneficios sociales que implican las acciones. Por citar uno, tal vez el más importante, es que el Organismos Ejecutivo, por medio de sus instituciones, evitó que la producción y comercialización de estupefacientes llegara a los connacionales; en especial, a niños y jóvenes.
A ello hay que agregar que, en el período citado, se registraron 6535 capturas vinculadas con estos crímenes; 111 de ellas, con órdenes de extradición. Es decir, que no solo se debilitaron sus capacidades de fabricación, sino las operativas y financieras.
Adicionalmente, el Organismo Ejecutivo mantiene estratégias para identificar pistas clandestinas, que guiaron la destrucción de 64 espacios que permitían el ingreso de aeronaves, presuntamente, cargadas con mercancía ilegal.
Además, este esfuerzo combinado entre las carteras citadas ha reducido el aterrizaje de avionetas, las que pasaron de 41 en 2020 a 3 durante este año.
Lo cierto es que como describe el eje de Gobernabilidad y Seguridad en Desarrollo, de la Política General de Gobierno 2020-2024, la administración que lidera el presidente Alejandro
Giammattei ha fortalecido el Estado de derecho, lo que redundó en la mejora de la convivencia pacífica y generó condiciones favorables para la inversión.