Como ha ocurrido en los últimos tres años, el Gobierno de la República atiende a las familias que, económicamente, más necesitan del auxilio del Estado.
Esta administración se ha propuesto combatir, contener y superar uno de los principales flagelos que viven los connacionales, como es el caso de la desnutrición, particularmente de infantes.
De esa cuenta, desde las primeras semanas de gestión, el Presidente de la República puso en marcha lo que denominó Gran Cruzada Nacional por la Nutrición (GCNN), en la que involucró a las entidades del Ejecutivo que tenían que ver con el tema y a organizaciones privadas e internacionales con las que se han integrado acciones y proyectos que llevan alimentos y alivio a quienes habían permanecido en el olvido.
Como parte de la GCNN, ayer, representantes de los ministerios de Salud, Defensa, Agricultura, Desarrollo y Educación y de la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional recorrieron ocho zonas de la ciudad capital, con el objetivo de llevar víveres a hogares que tienen algún integrante con síntomas de la citada enfermedad.
Es evidente que estas muestras de solidaridad deberían ser una constante de las autoridades de turno; sin embargo, no ha sido así, razón por la cual la desnutrición, lejos de decrecer se incrementó. Es ahora cuando la voluntad, el esfuerzo y los recursos se unieron, que los guatemaltecos se sienten apoyados y confiados en que superarán la situación.
“Esta es una lucha por la vida, el futuro y el desarrollo del país”, ha expresado en diferentes ocasiones el jefe de Estado, quien sabe que los niños son los principales afectados por esta injusticia. De esa cuenta, ha reiterado que no escatimará recursos ni empeños en la construcción de una Guatemala con oportunidades para todos, donde haya empleo, seguridad y prosperidad, pero, sobre todo, esperanza de una vida digna.