Durante años, la población vulnerable a la pobreza y pobreza extrema estuvo aislada del respaldo para enfrentar sus problemas y necesidades. En este segmento están la niñez con desnutrición y los adultos mayores.
La administración del Presidente de la República se comprometió a trabajar de manera incansable a fin de proteger a estos grupos sociales. De esa cuenta, el Gobierno impulsa el combate del hambre, refuerza los planes de asistencia a las personas de la tercera edad y genera condiciones para más empleos.
En el caso de los abuelos, estos han encontrado en el Ejecutivo un aliado estratégico de protección, debido a que el jefe de Estado ha redoblado los planes de desarrollo en todos los departamentos del país.
El Programa de Aporte Económico al Adulto Mayor (PAM) es una de las iniciativas insignia del dignatario. Recientemente llegó a más de 3400 guatemaltecos del norte y oriente del territorio nacional. A partir del próximo 15 de julio, recibirán un estipendio mensual de Q500.
El mandatario entregó más de 1 mil notificaciones en Baja Verapaz, 1200 en Jalapa e igual número en El Progreso. El PAM tiene como meta incorporar este año a 71 mil nuevos beneficiarios a la iniciativa.
Durante la gira de trabajo a estos departamentos, las autoridades distribuyeron víveres, organizaron jornadas médicas para quienes sufren de alguna enfermedad propia de la vejez y entregaron mejoras en infraestructura educativa.
Con estas y otras acciones, el gobernante reafirma su compromiso con los guatemaltecos más desfavorecidos, a quienes el Estado retribuye su aporte al país y los tributos que pagan.