“Soy el primer Presidente municipalista del país, porque reconozco la importancia de los gobiernos locales para continuar avanzando en el desarrollo integral de Guatemala”, expresó el mandatario Alejandro Giammattei durante un encuentro que sostuvo con alcaldes de Alta Verapaz, como parte de su tercera gira nacional de trabajo.
Visto el apoyo que ha dado a las autoridades locales, desde que inició su administración, el 14 de enero de 2020, es evidente que el gobernante sostiene con hechos sus palabras. Para ello, basta citar que su administración destaca por el impulso a la descentralización de los servicios y que más financiamiento destina para las obras de desarrollo que demandan las comunidades.
Alta Verapaz ejemplifica el respaldo que reciben los departamentos. Esa jurisdicción contabiliza Q3287.2 millones en asignaciones entre 2020 y 2023, los cuales han llegado vía el Consejo Departamental de Desarrollo (Codede) y el aporte constitucional.
En este sentido, conviene resaltar dos aspectos: que estos presupuestos deben ser destinados para obras que impulsen y fortalezcan el desarrollo familiar y coletivo, así como que la cifra no incluye la inversión social que los 14 ministerios de gobierno realizan en los 22 departamentos.
Desde siempre, el presidente Giammattei ha tenido claro que la prosperidad de la nación se inicia y termina en las comunidades. Por esa razón, ordenó al Gabinete de Gobierno escuchar y atender las demandas de los 340 encargados de los ayuntamientos. Ese es el camino que permitirá el desarrollo integral de todos los guatemaltecos. No hay otro y el gobernante lo impulsa.
Recorrer hasta cuatro veces el país en un año para comunicarse con alcaldes y líderes comunitarios le ha facilitado palpar la pobreza, pero también constatar y exigir el avance de las obras estratégicas, como le corresponde a un verdadero estadista.