El Gobierno de la República está comprometido con el bienestar de los grupos etarios vulnerables. En esta ocasión, nos referimos a los adultos mayores afectados a la pobreza y pobreza extrema.
En el presente año, el presidente Alejandro Giammattei ha instruido que los beneficios se extiendan más en la citada población, por lo que han sido incorporados en los programas sociales.
Uno de los proyectos que se ejecuta actualmente es Mis Años Dorados, a cargo de la Secretaría de Obras Sociales de la Esposa del Presidente (SOSEP), que atiende a miles de personas de la tercera edad, con servicios médicos, alimentarios y terapéuticos, entre otros.
Esta semana, 3 mil adultos mayores inscritos en el mencionado programa reciben la cuarta dotación de alimentos. Como todos los meses, personal de la SOSEP llega hasta las puertas de los hogares de los beneficiarios, para hacer entrega de la bolsa de víveres.
Granos básicos, cereales, harina, sopas, pastas, aceites y galletas, entre otros, son los artículos de primera necesidad que reciben los favorecidos, con los cuales se contribuye en la mejora de sus condiciones de vida y se refuerza su seguridad alimentaria.
Asimismo, se les proporciona kits de materiales de terapia ocupacional y didácticos, según sus habilidades. En algunos centros de atención se han logrado coordinar jornadas médicas con puestos de salud, clínicas municipales y privadas.
Los centros diurnos y permanentes de Mis Años Dorados impulsan actividades sociales y recreativas, que les permite a los favorecidos comprender que “envejecer” puede ser positivo y saludable, si se canalizan las necesidades de recreación y socialización.