En el marco de la Cumbre Extraordinaria de Jefes de Estado y de Gobierno de Centroamérica y España, que se celebró ayer en San José, Costa Rica, los líderes del Sistema de la Integración Centroamericana (Sica) unieron sus voces para avanzar en el bienestar de los pueblos de la región.
El cónclave fue el escenario para exhortar a una mayor solidaridad internacional y atender los problemas comunes de las naciones del área, especialmente la migración que ha causado crisis en el Istmo.
Por parte de Guatemala, el presidente Alejandro Giammattei hizo un llamado a los gobiernos centroamericanos a construir muros de prosperidad e impulsar el desarrollo que evite el éxodo hacia los territorios de Norteamérica.
Lejos de criminalizar a los migrantes, que se ven obligados a abandonar sus países ante la falta de oportunidades, es necesario buscar soluciones integrales al asunto, y esa fue la exhortativa del mandatario.
Hoy más que nunca, el bloque regional tiene la oportunidad de empujar a Centroamérica a un desarrollo sin precedentes, pero no se puede negar que en esta tarea se necesita del acompañamiento y cooperación de la comunidad internacional.
Por ello, Guatemala, representada por su jefe de Estado, pidió a España y al resto de Europa que coadyuven en el objetivo de atraer inversiones y crear empleos, pues la intención es que la región sea una tierra de oportunidades.
Es necesario dar un giro al abordaje de la migración pues, como lo mencionó el Presidente durante la Cumbre, luego de que se impusieran grandes restricciones en las fronteras, estas no detuvieron el éxodo.
Una de las opciones es trabajar juntos en la construcción de muros de prosperidad, que generen proyectos como el del Centro Logístico que ubicaría a la región como un importante polo de desarrollo.
Centroamérica puede cambiar, caminando en objetivos comunes y enfrentando el desafío de lograr el desarrollo humano, con el acompañamiento de la comunidad internacional. En ese sentido, es alentador saber que, luego de los planteamientos, España, Estados Unidos y la Unión Europea anunciaron su respaldo al Istmo.