Fernando Manuel Alonso Pedrero
Profesor de Geometría, Gestión del Prototipado Digital y Taller de Diseño
Maria Del Pilar Salazar
Profesora de Expresión Gráfica en Arquitectura
Diseñar un rascacielos en apenas 100 horas puede parecer una meta futurista. Pero con la evolución de la IA podemos plantearnos seriamente la posibilidad de completar el diseño arquitectónico de un rascacielos en este plazo, asignando alrededor de un 20 por ciento de ese tiempo al diseño generativo, un 30 por ciento al análisis estructural y simulaciones avanzadas y el 50 por ciento restante a la coordinación y optimización a través de BIM (modelado virtual).
Todo esto permite maximizar la eficiencia del proceso completo. Software de diseño: buenas vistas y ahorro energético. El trabajo de diseño comienza ahora introduciendo parámetros y objetivos en el software. Para un rascacielos, esto puede incluir la integración de tecnologías de energía renovable, la maximización de vistas o la optimización de la luz natural.
Estos sistemas pueden simular diferentes escenarios de iluminación a lo largo del día.
Entre otras cosas, la IA puede analizar la orientación del edificio, la ubicación de las ventanas y la configuración de las fachadas. Todo ello sin comprometer otros aspectos como la eficiencia energética y la privacidad. Además, estos sistemas pueden simular diferentes escenarios de iluminación a lo largo del día. Así asegura que el diseño final ofrezca confort lumínico y térmico a los ocupantes durante todo el año.
La IA procesa toda la información disponible y genera múltiples diseños que cumplen con los requisitos. Además, ofrece soluciones innovadoras y únicas a los desafíos arquitectónicos del proyecto. A partir de ese momento, es el arquitecto quien, con su criterio, selecciona la mejor opción. La demanda de la sostenibilidad y el uso de materiales. Otra aportación de la IA en la arquitectura de rascacielos es su capacidad para fomentar la sostenibilidad.
Continuará…