Marielos Carranza Mejía
El 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, una ocasión que nos insta a reflexionar sobre una problemática que afecta a 1 de cada 3 mujeres en todo el mundo. En este contexto, la ONU nos recuerda que la clave para erradicar esta violación generalizada de los derechos humanos reside en la inversión en la prevención.
La violencia contra las mujeres jóvenes y las niñas ha trascendido fronteras, manifestándose en ámbitos que van más allá del hogar, alcanzando el lugar de trabajo y extendiéndose incluso a los espacios en línea. Los efectos pospandemia, los conflictos y el cambio climático han exacerbado esta problemática, subrayando la urgencia de una respuesta integral.
En Guatemala hay avances significativos en el tema: entre ellos, un marco legal de prevención y erradicación de este tipo de violencia; creación y fortalecimiento de instituciones especializadas en el tema y promoción de campañas de sensibilización, entre otros. Cabe destacar que también existen retos en los cuales se debe trabajar.
La prevención de la violencia contra las mujeres es una inversión fundamental para construir un futuro de igualdad para todas las generaciones.
De acuerdo con los datos de la ONU, a nivel mundial tan solo un 5 por ciento de la ayuda gubernamental se destina a la violencia en contra de las mujeres, y se invierte menos del 0.2 por ciento; esta situación demuestra la necesidad de incrementar la asignación de recursos económicos en la prevención y en apoyo, educación y empoderamiento.
Es crucial comprender que este tipo de violencia no es solo un problema que afecta a las mujeres, sino a toda la sociedad. Es un costo social que se debe abordar colectivamente; por lo que la inversión en la prevención no solo protege los derechos fundamentales de las mujeres, sino que también contribuye a la construcción de sociedades más equitativas y justas.
La erradicación de la violencia en contra de las mujeres es responsabilidad de todos y todas, y la inversión en prevención es la llave para un mundo más seguro e igualitario para las generaciones futuras.
En el marco del 25 de noviembre, el Consejo Nacional de la Juventud refuerza su compromiso de continuar con las vinculaciones interinstitucionales, y promover acciones para que todas las jóvenes vivan en país libre de agresiones en su contra.