Consejo Nacional de Áreas Protegidas
El Sistema Guatemalteco de Áreas Protegidas (Sigap) se creó con la finalidad de conservar la diversidad biológica, los recursos naturales y culturales, siendo estos indispensables para el desarrollo sostenible del país. Citamos algunos de los bienes y servicios que proveen las áreas protegidas: oxígeno, captación de carbono, agua, ecoturismo, alimentos, medicinas, además de la conservación de ecosistemas que albergan una alta diversidad biológica de especies de flora y fauna protegidas y amenazadas, la protección de áreas de recarga hídrica, entre otros.
Sin embargo, las áreas protegidas enfrentan amenazas como los incendios forestales, los cuales afectan la diversidad biológica, así como otros ecosistemas de alto valor para la humanidad. Los hábitats de las aves, anfibios, reptiles y mamíferos son severamente afectados por el fuego; además, se pierde la cobertura forestal, se afecta la captación de agua y carbono, también se acelera el cambio climático entre otras consecuencias.
Por lo que el Conap a través de sus 10 direcciones regionales y 3 direcciones subregionales realiza actividades de prevención y control de incendios; esto, según lo establecido en el Plan de Gestión del Fuego para las Áreas Protegida de Guatemala, que busca organizar y sistematizar todas las acciones vinculadas a la prevención, control y liquidación de incendios, así como a la restauración de
ecosistemas afectados.
¡Valoremos nuestra Guatemala Megadiversa!
Entre las acciones realizadas en 2022 resaltamos cursos y talleres que se impartieron bajo estándares calificados de formación, para la atención de incendios forestales y fortalecimiento del personal que permite proceder de forma segura para el control y liquidación de los siniestros, dirigido a técnicos forestales, guardarrecursos y comunitarios, entre otros.
En los últimos cinco años, la tendencia es creciente respecto a la ocurrencia de incendios forestales y respecto al área afectada. Para la temporada de incendios 2021-2022, las principales causas de incendios en áreas protegidas fueron: el 40 por ciento de los incendios fue intencional; el 22 por ciento, causado por quemas agrícolas; un 16 por ciento, por quema de pastos; el resto se distribuye en otras 11 causas. Por lo que el Conap junto a socios estratégicos trabajamos en
acciones de prevención.
Hacemos un llamado a realizar rozas de forma responsable, a no provocar incendios forestales, denunciar a quienes atentan contra el patrimonio natural y cultural, recuerda que es un delito penado por la ley. La salud de los ecosistemas repercute en el bienestar y la salud de todas las especies que habitan en el planeta, incluido el ser humano.