Consejo Editorial Conadi
Michael Fox, actor canadiense que ganó popularidad al interpretar a Marty Mcfly, el protagonista de la película de ciencia ficción Volver al Futuro, que en su momento cautivó al público por la tecnología que pronosticaba para las décadas venideras, continúa hoy en día sumando seguidores de esta saga de los años 80.
Fox a temprana edad, a los 29 años para ser exactos, cuando estaba en la cima del éxito, los reflectores volvieron a iluminarlo, pero no fueron los focos de Hollywood sino los de una clínica donde le diagnosticaron Parkinson, enfermedad neurodegenerativa que afecta las regiones del cerebro que producen dopamina, caracterizándose por temblores de las manos cuando están en reposo, afectación del habla y rigidez muscular, que se manifiesta especialmente en la población adulta mayor.
El vivir con esta enfermedad motivó a este reconocido actor a crear una fundación para promover investigaciones para su cura o el desarrollo de medicamentos que permitan tener una mejor calidad de vida. Además, su fama ha contribuido a visibilizar a las personas que desarrollan esta condición.
Esta enfermedad motivó a este reconocido actor a crear una fundación para promover investigaciones.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró, en 1997, el 11 de abril como el Día Mundial del Parkinson, en honor de James Parkinson, el médico que descubrió esta enfermedad, considerada como el segundo trastorno degenerativo de progresión lenta del sistema nervioso central, más común después del mal de Alzheimer, generador de discapacidad, que a mediano o largo plazo provoca la pérdida de la autonomía física, mental, intelectual y sensorial y, por consecuencia, limita el ejercicio de los derechos humanos.
El origen del padecimiento es genético pero también puede desarrollarse por traumatismo craneoencefálico o accidentes cerebrovasculares. Prevenir el desarrollo de esta enfermedad es sumamente complicado, con su avance se alcanza un alto grado de dependencia, precisando del apoyo de familiares o cuidadores. No obstante, muchas personas son abandonadas en instituciones públicas o en hogares de ancianos. Este día es propicio para generar toma de conciencia y promover la creación programas de atención y protección a esta población, pues el derecho al acceso a la salud y a la dignidad culmina hasta el último movimiento y latido de todo ser humano.