Guatemala es reconocido como un centro de origen y diversidad de plantas cultivadas, se encuentran especies de frijol, papaya, algodón, camote y maíz. Desde el punto de vista genético, se acepta que el maíz evolucionó a partir de un pariente silvestre todavía presente en Mesoamérica; las especies silvestres emparentadas con el maíz se reportan principalmente para México y Guatemala. Además, la gran diversidad genética presente en el maíz cultivado propio de los agricultores que desarrollan tecnología tradicional se produjo a partir de un proceso de domesticación que llevó alrededor de unos 10 000 años.
El 13 de agosto se establece como Día del Maíz.
Existen diferentes evidencias tales como antecedentes mitológicos, arqueológicos, y etnohistóricos. Entre los antecedentes mitológicos se mencionan la descripción del origen del hombre a partir del maíz contenida en el Popol Wuj, la existencia del dios del maíz. El Ministerio de Cultura y Deportes, a través del Acuerdo Ministerial Número 767-2011, ha declarado al maíz como Patrimonio Cultural de la Nación y declara de interés nacional la promoción, protección e investigación del maíz, promoviendo la identificación, clasificación, documentación y difusión de los diferentes usos, tradiciones y saberes relacionados con el maíz. Adicionalmente, el Decreto Legislativo 13-2014 declara al maíz como Patrimonio Natural y Cultural, y establece el 13 de agosto como día del maíz.
El Conap, como punto focal del Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB), tiene la responsabilidad de velar por la conservación y uso sostenible de la Diversidad Biológica de Guatemala, dentro de la cual se incluye la diversidad genética del maíz, especialmente de sus parientes silvestres, así como del conocimiento tradicional asociado al maíz. Una de las acciones prioritarias desde el Conap es el establecimiento de una categoría de área protegida que tome como elemento principal el maíz silvestre; especialmente el presente en el área de Huehuetenango, el cual es endémico y reconocido como uno de los parientes silvestres más cercanos al maíz cultivado. Asi mismo, se plantea que es necesario conocer, conservar y utilizar el conocimiento tradicional relacionado con los usos gastronómicos del maíz para conservar los diferentes tipos de maíz presentes en el territorio nacional. El Conap reafirma su compromiso en la protección de la diversidad biológica del país.