María Dolores Marroquí
Walda Elena Barrios Ruiz, partió a otra dimensión el 28 de abril. Fue una feminista incansable, académica comprometida con las transformaciones estructurales de Guatemala y militante planetaria, maestra y formadora de muchas generaciones que hoy se acercan al feminismo como una propuesta crítica vital. Investigadora, con varios títulos universitarios; defensora del derecho a la disidencia sexual, promotora de la Educación Integral en Sexualidad, realizó múltiples estudios alrededor de la antropología feminista actual.
Hizo una revisión teórica de las ideas sobre el Estado; indagó sobre la violencia como negación de la historia de vida; los suicidios en niñas y adolescentes con motivo de embarazo; la violencia y el acoso laboral en contra de la población LGBTI; las masculinidades hegemónicas y su influencia en uniones, matrimonios y embarazos en niñas, adolescentes y jóvenes. Fue condecorada con la medalla de la Oficina Nacional de la Mujer y el sello Vilma Espín, de la Federación Internacional de Mujeres a aquellas que se han destacado en la defensa de los derechos de las mujeres. Su mestizaje colorido, su elocuencia y precisión la caracterizaron toda su vida.
Fue condecorada con la medalla de la Oficina Nacional de la Mujer y el sello Vilma Espín.
Militante de antaño, de luchas diversas, plurales e históricas marcó los lugares por donde pasó, incluyendo el exilio forzado. Con la cámara dispuesta coleccionó recuerdos de muchos momentos, casi todas estamos en ellos porque capturó imágenes de los lugares donde se hacía la disputa política: plazas, salones de clase, espacios de reuniones y la celebración de la vida.
Fue candidata a la vicepresidencia de la República por la URNG en las elecciones 2007, y a diputada por el Distrito Metropolitano por el Consejo de Pueblos Mayas (CPO) y la Convergencia por la Revolución Democrática (CPR) en las elecciones 2015. Fue productora y conductora del programa radial Caracoleando desde la academia, que se transmite en Radio Universidad.
Integrante y presidenta de la Asociación de Mujeres para Estudios Feministas (AMEF) y coordinadora del Programa de estudios de Género y Feminismos de la Flacso, Guatemala. Con tanta vida, con tantos planes, tantos sueños, se fue Walda, una mujer continental en palabras de sus cómplices más cercanas, quienes junto al resto de feministas extrañarán profundamente sus palabras, energía y saberes. #LaDignidadEmancipa.