La película Kler (Clero), una controvertida cinta que aborda sin complejos los temas del abuso infantil, las relaciones de pareja, la corrupción, la codicia y el alcoholismo en el seno de la Iglesia católica polaca, se ha convertido en el filme con más espectadores en Polonia en lo que va del siglo.
Magna concurrencia
Cuatro semanas después de su estreno, no menos de 4 millones 330 mil personas han acudido a las salas para ver esta producción polaca, dirigida por el realizador también polaco Wojciech Smarzowski.
La cinta supera a todas las películas extranjeras proyectadas en Polonia en los últimos 29 años, incluidos éxitos como Avatar, Cincuenta sombras de Grey o Titanic.
Testimonial
Basado en hechos reales, Kler incluye testimonios de víctimas de abuso sexual protagonizado por religiosos. Presenta una galería grotesca de personajes que incluyen a un sacerdote alcohólico, otro que alienta a su amante a abortar, y un alto jerarca católico involucrado en escándalos de corrupción, quien mantiene buenas relaciones con los bajos fondos.
La actividad de estos personajes se desarrolla con total impunidad, en el contexto de una sociedad pasiva y crédula, retratada como cómplice de los delitos cometidos.
Contraparte
La cinta ha sido duramente criticada por organizaciones ultraconservadoras, que ven en ella un ataque injustificado a la Iglesia católica.
El periódico Gazeta Polska, de tendencia ultraconservadora, recordó a sacerdotes considerados héroes nacionales: “Son nuestro tesoro en la lucha contra el nazismo, el comunismo, el movimiento LGBT o los islamistas”.
*EFE