Hijo de Gustavo Mena y Joaquina Grajeda, la infancia de Guillermo Grajeda Mena (1 de octubre 1918 – 5 de junio 1995) transcurrió bajo el cuidado de su tía Matilde, en el barrio de La Recolección. En 1937, ingresó en la Academia Nacional de Bellas Artes, donde descubrió su gran pasión por el arte. Nos adelantamos a la conmemoración del centenario de su nacimiento, para contemplar algunas pinceladas de la vida y obra de esta figura de la plástica guatemalteca.
Primeros pasos
En 1941, Guillermo Grajeda Mena presentó su primera exposición como integrante de la Asociación de Artistas y Escritores Jóvenes de Guatemala. La hoy conocida como Generación del 40 realizó y promovió cambios en el concepto del arte en el país, al concebir un estilo sincrético, que enlaza técnicas contemporáneas con raíces prehispánicas. “Rompieron con las metodologías académicas tradicionales y entraron en el pico de la modernidad en la plástica”, explica el curador e investigador Guillermo Monsanto.
Ese fue solo el comienzo de una carrera plagada de múltiples facetas, afirma Monsanto. Grajeda Mena fue escultor, pintor, grabador, muralista, dibujante y ensayista. Pero también se desenvolvió como caricaturista, sobre todo en sátiras contra el régimen de Jorge Ubico, publicadas en El Libertador, periódico dirigido por Alfonso Bauer Paiz.
Estilo propio
Siempre en busca de su estilo, al terminar su formación en la Academia Nacional de Bellas Artes, Grajeda Mena, junto al también artista Dagoberto Vásquez, gestionó una beca para estudiar en Santiago de Chile. Esto, dice Monsanto, para evitar seguir la corriente mexicana, norteamericana o europea. “Aunque destacaron en el mismo universo de las expresiones que estaban en boga en ese momento, lo consiguieron por medio de sus propias conclusiones”, apunta el director de Galería El Attico.
Gustavo Grajeda, nieto del artista, relata que a su regreso al país, en 1948, el creador estrenó una nueva plaza gubernamental y se convirtió en el primer Decorador de Museos. De esa cuenta, ilustró con murales y dioramas algunos recintos nacionales tan importantes como el Museo del Libro Antiguo y el Museo de Arte Colonial, en Antigua Guatemala.
Rasgos
Un punto determinante de la carrera de Grajeda Mena, indica Monsanto, fue cuando ayudó al artista Antonio Tejeda Fonseca a llevar registros del descombro de Tikal y otros sitios arqueológicos. Según el investigador, tener contacto con creaciones y evidencias prehispánicas en sellos y estelas, influenció su obra. De esa forma, en sus piezas se observa un rasgo “achinado” en los ojos de los personajes: “Son características que integró por determinarlas como locales”.
Monsanto resalta, sobre todo, su capacidad para distenderse en cada una de sus facetas. En la pintura utilizó todas las técnicas, aunque, finalmente, se decantó por la acrílica, “que resolvía según su interpretación de la obra de los mayas”. En el dibujo, en cambio, era muy gestual, con retratos de una sola línea, en los que la observación y el manejo de luces y sombras eran primordiales. Como escultor, transitó por el bronce, el barro y el papel maché.
Su otra obra
Además de una vida dedicada a la creación, Grajeda fue catedrático en la
Escuela Nacional de Artes Plásticas y la Universidad de San Carlos. Fue parte del directorio del Instituto de Antropología e Historia, director del Museo de Arqueología y Etnología y del Museo de Historia y Bellas Artes. También ingresó como académico numerario en la Sociedad de Geografía e Historia de Guatemala.
Amplio catálogo
Grajeda Mena dejó al país una vasta obra, que se encuentra dispersa y distribuida en distintos sitios.
- Entre sus piezas públicas destaca el relieve Por la fuerza y la fe (La Conquista), creado con la técnica de fundición in situ, en el poniente del edificio de la Municipalidad de Guatemala, como encargo de Julio Obiols, alcalde de la comuna, en 1955.
- También fue responsable del Monumento al Acta de Independencia, que se alberga en el Archivo General de Centro América, 4a. avenida, entre 7a. y 8a. calle, zona 1.
- Junto a Antonio Oliveros, apoyó a Antonio Tejeda en la elaboración de los murales de los Códices de Dresde y Trocortesiano, que ilustran la Biblioteca Nacional. “Aunque no tengan su firma, al observarlos es posible reconocer la mano de Mena”, resalta Monsanto.
- Su obra más representativa, opina Monsanto, son los murales expuestos en el Museo Regional de Arqueología de La Democracia, Escuintla. De acuerdo con Gustavo Grajeda, esta es una colección de piezas en planchas de durpanel, que ilustran pasajes del Popol Vuh, así como el origen y desarrollo de las culturas precolombinas, entre otros.
Homenajes
Este 2018 museos y galerías han conmemorado el centenario del nacimiento del artista visual.
- De mayo a agosto, el Museo de la Universidad de San Carlos de Guatemala albergó Mena en el Arte, 1918-2018.
- La Escuela Nacional de Artes Plásticas Rafael Rodríguez Padilla, en el marco del Festival de Junio, inauguró Mena: una línea de 100 años.
- Este mes, la Universidad Popular abrió las puertas de su Sala Eloy Amado Herrera a la Exposición en homenaje al Centenario del Natalicio del Artista visual Guillermo Grajeda Mena.
Lo que viene
La primera semana de octubre también llevará la firma del artista.
- Mena es la muestra que El Estudio Atelier inaugurará el lunes 1, a las 18:30, en la Galería Boesche Rizo, 3a. avenida 11-28, zona 1.
- La Escuela Nacional de Artes Plásticas (interior Centro Cultural Miguel Ángel Asturias) presenta Una línea de 100 años 1918-2018, el miércoles 3 las 17:00.
- Mena Centenario puede ser visitada a partir del jueves 4 a las 19:00 en Galería El Attico, 4a. avenida 15-45, zona 14.