Penélope Cruz y Jessica Chastain presentaron hoy en Cannes, junto a Marion Cotillard, Fan Bingbing y Lupita Nyong’o, su futura película de espionaje, 355, que pretende subvertir un género habitualmente dominado por hombres.
Las cinco actrices llegaron en barco al muelle del exclusivo hotel Majestic de la ciudad, para adelantar con un breve posado ante los medios gráficos una cinta que estará dirigida por el británico Simon Kinberg, también presente en la Croisette.
Cruz con un veraniego vestido largo de tirantes azul y blanco, Nyong’o, Cotillard y Chastain de negro y Bingbing de riguroso blanco no mediaron palabra, pero pusieron cara a un proyecto idea de Chastain, que tras Criadas y señoras quería volver a hacer una película con un elenco femenino.
Su productora, Freckle Films, está detrás de este thriller que las distribuidoras FilmNation Entertainment y CAA Media Finance Group están presentando a futuros compradores en el marco del Festival de Cannes, que se clausura el 19 de mayo.
“Es una historia de amistad, de extranjeros y enemigos que se unen contra todo pronóstico. Por muy radical que sea hacer un filme de espionajes centrado en mujeres espías, es igualmente revolucionario hacer uno sobre agentes de diferentes naciones unidos como si fueran uno”, dijo Kinberg en una nota difundida por FilmNation a principios de mes.
Kinberg y Chastain ya habían trabajado juntos en X-Men: Dark Phoenix y la intérprete, según la web especializada Deadline, le sugirió este proyecto mientras trabajaban en esa cinta de superhéroes.
El posado de Cruz de hoy sigue al protagonizado el martes en la alfombra roja del festival, en el que su película Todos lo saben, dirigida por el iraní Asghar Farhadi y protagonizada, entre otros, por Javier Bardem, inauguró la competición por la codiciada Palma de Oro
*EFE
