El periplo de un tren en Mozambique en plena guerra civil, filmado por el director brasileño radicado en ese país Licíno Azevedo, ganó la Tanit de Oro, máxima recompensa del festival de Cartago cuya 28ª edición concluyó ayer en Túnez.
El tren de sal y azúcar (Comboio de Sal e Açucar) sigue al estilo western el peligroso viaje de un convoy que intenta cambiar sal por azúcar, mientras atraviesa zonas rebeldes en 1989, durante el conflicto interno que sacudió al país africano.
Muy populares, las jornadas cinematográficas de Cartago son uno de los principales eventos culturales de Túnez, dedicadas al cine africano y árabe.
La Tanit de Plata fue para Los iniciados, filme sudafricano de John Trengove, que evoca los amores homosexuales y un rito ancestral de iniciación.
La película Volubilis del marroquí Faouzi Bensaidi, una crónica social que arremete contra el liberalismo, ganó por su parte la Tanit de Bronce.
En el rubro documentales fue recompensada Ghost Hunting, del palestino Raed Andoni, y Más allá de la sombra, filme tunecino crudo e intimista de la directora Nada Mezni Hafayedh acerca de la comunidad homosexual de su país.
“Jamás me hubiese imaginado que mi película estaría en la selección y que los tunecinos la podrían ver, porque desgraciadamente en Túnez ser homosexual es una abominación, es estar fuera de la ley”, dijo la realizadora a la AFP.
*AFP