Un baile repleto de romanticismo narra la historia de Odette. Tras recibir la maldición del brujo Von Rothbart, la joven se transforma en cisne y solo puede volver a su condición humana durante la noche, o hasta que el amor verdadero rompa el hechizo. El Ballet Clásico de Rusia llevará a escena El lago de los cisnes, mañana a las 20:00 en la Sala Efraín Recinos del Centro Cultural Miguel Ángel Asturias. Costos: platea Q580, platea lateral Q480, balcón I Q380 y balcón II Q280.
Emoción
El lago de los cisnes es considerada una obra emblemática de la danza clásica, pues une la música del compositor Piotr Ilich Tchaikovsky con la coreografía del célebre Marius Petipa. “Este espectáculo provoca en los involucrados emoción, pasión y ternura. Por eso, aunque la realización del montaje nos ha tomado por lo menos un año, dominar su complejidad requiere prepararse toda la vida”, comentó Evgeniya Bespavola, directora de la compañía.
Retos
Debido a su estilo académico cristalino, elegante y frágil, la pieza, marcada por el lirismo, ha supuesto un reto para un cuerpo de baile conformado por 29 artistas y liderado por Orekhova Lilia en el rol de Odette. “La coreografía precisa de altos conocimientos técnicos. Es necesaria una gran ejecución en la representación de los personajes, en especial por el choque de caracteres entre la fina pureza del Cisne Blanco y la intriga del Cisne Negro”, detalló Bespavola.
