Nada más cruzar la puerta, nuestros ojos se topan con una suerte de obras que cubren las paredes. Aunque cada pieza fue elaborada en años distintos y bajo diferente temática, las historias plasmadas en los lienzos pertenecen a un mismo autor: Rodolfo Abularach. En el epicentro de su creatividad, su taller, nos recibe el pintor que será homenajeado en la XIV edición de la exposición y venta Del arte al niño. La cita es hoy a las 19:00 en el lobby de las Torres I, II y III de Zona Pradera, zona 10. La entrada es libre.
Espacio de tranquilidad
Pinceles, colores y lienzos, que esperan su turno para llenarse de vida, ocupan un ambiente cargado de arte en el que también es posible observar un piano de cola, un amplificador y tres guitarras. Rodolfo Abularach comenta que luego de volver de Nueva York, en 2005, se instaló en casa de su hermano para fijar su taller. Desde entonces, en este espacio trabaja con tranquilidad, pues, a sus 84 años se confiesa una persona libre de arrebatos. Por eso, entre risas, recuerda un punto definitivo en su camino: “En una ocasión, en 1959, al no encontrar inspiración, me enojé tanto que destruí la tela con mi espátula. De ese momento surgieron ideas que cambiaron mi obra”.
Evolución
Toros, ángeles, retratos y ojos dan cuenta de las etapas por las que Abularach ha transitado a lo largo de su carrera. Mas, para el artista las técnicas no quedan en el olvido ya que, asegura, el verdadero arte no perece con el tiempo. “La pintura actual, comparada con la de hace 40 años, muestra un cambio enorme. Lo que resaltan son las expresiones que, pese a que tienen creatividad, han surgido sin tener un método o tradición que las haga permanecer”, explica.
Halagos
La trayectoria de Abularach lo ha convertido en los últimos tiempos en objeto de homenajes, como el que hoy se le rinde durante la exposición y venta Del arte al niño, de la Fundación para la Superación Integral de Menores con Lesión Cerebral. Aunque se revela feliz, el creador los considera inmerecidos, pues él pinta por amor y dedicación. “Es importante cuidar que no se suba el ego y por eso he sido fiel a mí mismo y a mi técnica. Un artista se forma de las influencias de otros, de los consejos y las críticas que se reciben”. Así, relata, no tiene discurso preparado. La muestra podrá visitarse a hasta el jueves 23 de noviembre de 9:00 a 18:00.
