El Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN) presentó este martes un estudio relacionado con el hacinamiento que se registra en los centros carcelarios de Guatemala, así como una propuesta para disminuir la sobrepoblación en las prisiones.
De acuerdo con la institución, actualmente los centros de privación de libertad “operan al triple de su capacidad instalada, lo cual ubica al país como el segundo con más sobrepoblación carcelaria en Latinoamérica y el quinto a nivel mundial”.
El documento, en donde se proponen diferentes acciones para contrarrestar este flagelo, fue entregado por representantes del CIEN al viceministro de Seguridad, Ricardo Guzmán; y al subdirector del Sistema Penitenciario (SP), Rony Santos.
El análisis realizado por el CIEN reveló que el hacinamiento aumenta los niveles de estrés, genera mayor violencia y agresividad, lo cual a su vez aumenta la riñas, la escasez de servicios disponibles por recluso e imposibilita la clasificación de la población interna.
Asimismo, resaltó que lograr el deshacinamiento en el SP permitiría tener las condiciones favorables para la rehabilitación de los privados de libertad.
Según el CIEN, se debe buscar alternativas al encarcelamiento, fortaleciendo las medidas sustitutivas para que la prisión preventiva sea la excepción, así como implementar mecanismos alternos a la cárcel para el cumplimiento de condenas.
“Para que la medida privativa de libertad cumpla su finalidad de rehabilitación, es indispensable que las prisiones sean seguras, ordenadas y que fomenten la rehabilitación, lo cual no es posible actualmente”, se añade en el texto.
La gráfica demuestra que desde 2007 la población carcelaria aumentó, pero el número de espacios disponibles se estancó. (Información del CIEN)
La institución indicó que el déficit actual de espacios carcelarios es de 14 mil, de los cuales 5 mil 200 corresponden a prisión preventiva y 8 mil 800 al cumplimiento de condena.
Por aparte, Walter Menchú, analista del CIEN, explicó que actualmente hay 21 cárceles en el país, pero que solo 5 de estas son de cumplimiento de condena, por lo cual consideró que es necesario incrementar los espacios para quienes purgan una pena.
Entre otras recomendaciones que hace la institución se menciona: realizar un plan de infraestructura a mediano y largo plazo, con criterios técnicos para adecuar espacios carcelarios; y hacer una revisión exhaustiva del código penal.
Asimismo, priorizar la construcción de infraestructura carcelaria; ampliar la infraestructura para las mujeres que están cumpliendo condena y construir una prisión de alta seguridad; así como implementar en las cárceles una nueva administración carcelaria y un nuevo régimen interno.
De igual forma, en el estudio se recomienda: “mejorar el proceso penal a fin de descongestionar los juzgados y tribunales y así dar cumplimiento a los plazos procesales establecidos”.
Deja un comentario