La población afrodescendiente de Guatemala ha estado históricamente excluida, reconocieron hoy las autoridades, que buscan cambiar esa realidad a través de la promoción de los derechos humanos y el desarrollo de esa población.
En ese contexto se celebró este viernes el I Congreso Anual del Decenio Internacional de los Afrodescendiente, con la asistencia de un pequeño grupo de afrodescendientes y de representantes gubernamentales, a fin de impulsar la inclusión así como leyes que reconozcan a esa población.
El congreso, de un solo día, fue organizado por la Comisión sobre la Discriminación y el Racismo (Codisra), la Comisión Presidencial de los Derechos Humanos, y la Asociación de Afrodescendientes de Guatemala (Afrosa).
El coordinador presidencial de la Codisra, Rudy Camposeco, explicó que no existen datos de cuántos habitantes de esa población hay en el país pero estima que son unos 60 mil los que viven en el caribe.
Reconoció que este sector ha sido históricamente excluido y que en enero próximo tiene previsto revelar un diagnóstico que se está haciendo para conocer la situación de los afrodescendientes.
Lo que se busca, dijo, es promover el respeto, la protección y las libertades económicas, sociales, culturales, civiles y políticas, fundamentales, tal como lo manda la Declaración Universidad de Derechos Humanos.
Agregó que Codisra acompaña todas las actividades que se promueven para fortalecer el respeto de este sector en Guatemala.
“Tenemos una oportunidad histórica de visibilizar a los afrodescendiente porque se debe valor su historia”, expresó.
El presidente de la Asociación de Afrodescendientes de Guatemala (Afrosa), Henry Stock, creada hace siete años, dijo en la actividad que tienen previsto realizar cada año un congreso hasta llegar a 2024 para conocer el avance de su desarrollo económico, social y cultural.
El Decenio Internacional para los Afrodescendientes fue proclamado por la Asamblea General de Naciones Unidas y se celebra desde 2015 hasta el 2024, con el fin de dar reconocimiento, justicia y desarrollo de esa población, que solo en Latinoamérica suma alrededor de 200 millones de personas de acuerdo a datos de la Organización de las Naciones Unidas.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Pueblos Indígenas del Congreso, Marcos Yax, se comprometió a impulsar la aprobación de la Ley de Reconocimiento de los Afrodescendientes, que ya recibió un dictamen favorable de esa instancia.
“Esta comunidad ha sido aislada y discriminada y ahora corresponde al pleno del Congreso aprobar la iniciativa para que se les beneficie”, subrayó.
Para que la ley sea aprobada debe aún superar tres lecturas en el pleno del Congreso.
* ACAN-EFE
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