En 1989 el Consejo de Gobierno del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo recomendó a la comunidad internacional que cada 11 de julio se conmemorara el Día Mundial de la Población, con el fin de aprovechar la oportunidad para centrar la atención en la urgencia y la importancia de los asuntos relacionados a este.
Para este año el tema propuesto es Invertir en las adolescentes, puesto que en su mayoría son consideradas por las comunidades y familiares que están preparadas para el matrimonio o la maternidad. Donde se ven obligadas a dejar las escuelas perjudicando su futuro, y aun permaneciendo en ellas puede ser difícil acceder a información básica sobre su salud, derechos humanos y reproductivos lo que las hace vulnerables a enfermedades, lesiones y explotación.
Ban Ki-moon, secretario general de la Naciones Unidas, insta a los gobiernos, empresas y sociedad civil a que se invierta y apoyen a las adolescentes. “Todas las personas merecen beneficiarse del crecimiento económico y el progreso social, trabajemos codo con codo para disfrutar de una vida en la que haya seguridad, dignidad y oportunidades para todos”.
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