El artista emergente, Brayan Medina, comienza a destacar con su carrera en el teatro y cine guatemalteco. Su más recientes trabajos incluyen 1991, la nueva película del cineasta Sergio Ramírez, y la producción Ánimas del Paraninfo, de Julio Roberto Dávila. Pero, además del cine, el histrión prevé el lanzamiento de su monólogo Miss Penélope, bajo la dirección del productor Luis Tuchán.
Papel detonante
En 2014, Medina actuó en Ovnis en Zacapa, cinta en la que interpretó a Juancho Carraza, un villano ligado al narcotráfico. Con esa misma producción fue invitado, junto al equipo de producción al Festival de Cine Latinoamericano, en Chicago, Estados Unidos. “Me sentí satisfecho con el papel que interpreté. La emoción me atacó al saber que iba a exhibirse el cine guatemalteco en ese país”, expresó el actor.
Ese mismo año, acudió al castin de 1991, del cineasta Sergio Ramírez, también director de la película Distancia. En ella repite un papel de villano, pero será el líder de un crew (grupo de baile) de B-boys. Coincidentemente, en 2014, el productor Julio Roberto Dávila lo escogió como protagonista de la cinta Ánimas del Paraninfo. En ambas producciones, los estrenos serán este año.
Medina es, además, músico, pues toca el violonchelo desde los 10 años, conocimientos que adquirió en el Conservatorio Nacional de Música Germán Alcántara, luego incursionó en la batería y el bajo.
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