El ecuatoriano Richard Carapaz dio la primera victoria a su país, en la historia del Giro y al equipo Movistar, con su triunfo en solitario en la octava etapa, entre Praia a Mare y Montevergine de Marcogliano, de 208 kilómetros, en la que el británico Simon Yates (Mitchelton) mantuvo el liderato.
Carapaz, ecuatoriano de Carchi, de 24 años y “maglia” blanca de mejor joven desde la etapa del Etna, sorprendió al grupo de favoritos con un ataque fulminante bajo la lluvia a 1.3 kilómetros de meta que le permitió abrir hueco, alcanzar al holandés Bouwman que marchaba escapado y presentarse en meta eufórico como vencedor de etapa.
Es la primera victoria ecuatoriana en la historia de la carrera rosa y estreno en el World Tour para el ciclista del Movistar, unos días después de imponerse en la Vuelta a Asturias. Un éxito saboreado en la recta de meta. Golpes en el pecho, emoción y foto para el recuerdo. Cruzó la meta con 7 segundos de adelanto respecto del grupo de favoritos, con Yates, Tom Dumoulin, Froome y los candidatos de la general.
Mañana, la novena etapa ofrecerá un plato fuerte de montaña entre Pesco Sannita y el Gran Sasso, de 224 kilómetros, en el macizo de los Apeninos. En la “Gran piñedra de Italia” podrían llegar las primeras diferencias importantes en la general. EFE