París AFP
“Quería un reto más grande”: el astro brasileño Neymar aterrizó hoy en la capital francesa e hizo suyo el lema de su nuevo club, el París Saint Germain, que no cesa de “soñar más en grande” desde su adquisición por los cataríes.
El delantero de 25 años, ataviado con camisa blanca, traje oscuro y corbata, hizo su aparición en la sala de prensa del Parque de los Príncipes, en medio de los destellos provocados por los flashes de los fotógrafos.
“Muy, muy feliz”, fueron las primeras palabras del capitán de la canarinha, que se mostró cómodo y suelto durante toda la conferencia de prensa.
No es casualidad que Neymar se haya convertido en el jugador más caro de la historia, después de abandonar el FC Barcelona, una vez abonados los 222 (Q1 mil 887 millones) de su cláusula de rescisión.
Un día después de la oficialización de su firma por cinco años con el PSG, Neymar abandonó la ciudad condal para aterrizar en la ciudad de la luz.
Desde la salida de su domicilio catalán, con destino al aeropuerto de Barcelona, hasta su llegada en un avión privado al aeropuerto parisino de Le Bourget, el cambio de vida de Neymar tuvo pendiente, minuto a minuto, a todo el mundo.
A su llegada a la pista fue recibido por su compatriota Maxwell, jugador del París SG hasta el año pasado y convertido en director deportivo adjunto del conjunto galo.
Neymar accedió seguidamente al interior de un vehículo que tomó dirección a París, desviándose y haciendo parada en el hospital de Neuilly, constataron los fotógrafos de la AFP.
“Quiero algo más grande, un reto mayor”, precisó el brasileño ya en la rueda de prensa, llegado a París por “la ambición de este club, muy parecida a la mía”.
“Esta fue una de las decisiones más difíciles de mi vida”, añadió.