Las discusiones públicas sobre el presupuesto multianual, que se iniciarían entre finales de este año y principios del próximo, incluirían la necesidad de reformar distintas leyes, con el propósito de acelerar los mecanismos para la ejecución del gasto y establecer normas de transparencia específicas para cada sector, entre otros aspectos.
El ministro de Finanzas, Julio Héctor Estrada, indicó que entre las normativas que deberían analizarse figuran las de Contrataciones del Estado, de Probidad y de la Contraloría General de Cuentas, “pues es preciso diferenciar los procesos para la compra de bienes y de servicios, así como los procedimientos para fiscalizar la inversión, ya que cada entidad tiene características particulares”.
En ese sentido, Pedro Prado, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, instó a la cartera del Tesoro a retomar los principios del pacto fiscal, mejorar la calidad y las normas para transparentar el gasto social, así como a evaluar la ejecución presupuestaria y los resultados de cada una de las entidades del Gobierno.
Preparan insumos
“Actualmente, se prepara la metodología para echar a andar el diálogo, lo cual pasa por recabar la información que nos brinden los insumos para determinar el costo per cápita por cada servicio prestado por el Estado y las brechas de cobertura, lo que facilitaría establecer la inversión que debe darse en educación, salud, infraestructura y seguridad, por mencionar algunos”, dijo el funcionario.
De acuerdo con lo informado, esto implicaría tener un horizonte de planificación más grande, que no se quede únicamente en papel o en un ejercicio puramente matemático, por lo cual se prevé plantear opciones legales, para que la aprobación del presupuesto multianual se institucionalice.
“Los beneficios de esta metodología serían muchos, pues permitiría contar con un monto planificado por 3 o 4 años, que se iría ajustando en cada período fiscal, según las necesidades de cada dependencia, y con ello, se evitarían las deudas flotantes y de arrastre”, explicó Estrada, y recordó que distintos países planifican sus gastos de esa manera.
Reforzarán tributación
Debido a que la mayor parte de los gastos se seguirían financiado por medio de la recaudación, la discusiones sobre el incremento en la captación de impuestos serían inevitables, puntualizó el titular de la cartera de Finanzas.
Asimismo, hizo hincapié, en que el tema tendría que abordarse no solo de forma orgánica, sino también pensar en la necesidad de implementar nuevos tributos.
A ese respecto, José González Campo, del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras, manifestó que el sector privado organizado está anuente a ser parte de un diálogo fiscal que priorice el uso honesto de los recursos y, a la vez, hablar sobre el aumento de las cargas impositivas.
“Si queremos que Guatemala cambie, tendremos que ayudar a subir la carga tributaria y pagar más impuestos incluyendo los que hoy no lo hacen”, manifestó Felipe Bosch, presidente de la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa).
En ese contexto, Gustavo Arriola, analista de desarrollo humano del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, consideró que el diálogo en esta materia es más que necesario, pues Guatemala debe ponerse al nivel del resto de Latinoamérica en carga tributaria, para generar mejores condiciones de vida para la población.
Planificación
Las pláticas con los sectores interesados se realizarían durante los primeros 4 o 5 meses de 2017, con el propósito de que el proyecto esté listo en junio, para alcanzar el ciclo presupuestario siguiente.
Prioridades para el 2017
El proyecto de Presupuesto para 2017, que asciende a Q79 mil 830 millones, prioriza salud, educación, seguridad y justicia, estas últimas áreas se privilegiaron para continuar con el combate a la corrupción, persecución de estructuras criminales y fomentar la transparencia en la gestión de Gobierno, dijo Julio Héctor Estrada, ministro de Finanzas.
En tanto, en la propuesta de Prespuesto Multianual 2017-2021 se contempla que para 2021 los gastos se elevarían a Q97 mil 312.8 millones.
Dentro de los rubros que formarían parte de los ingresos se calcula que el 77.8 por ciento de los mismos sería cubierto con recursos provenientes de la recaudación.
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