sábado , 23 noviembre 2024
Inicio Sin categoría Trágico retorno
Sin categoría

Trágico retorno

No se trata de culpar, todos tenemos algo que ver, somos una sociedad que le falta evitar, proponer, exigir para no lamentar.

El lunes, inicio de semana laboral, después de un descanso, reflexión espiritual, viaje y reunión familiar, me llamó la atención el titular principal de uno de los periódicos de sucesos, que con letras rojas sobre la fotografía expresiva de un hecho violento en carretera, posicionaba en tres palabras “un trágico retorno”, lo que no hemos podido superar los que llevamos la responsabilidad de vidas en el interior de un vehículo, por distintos motivos que se desprenden de la irresponsabilidad a la hora de conducir y llevar personas.

Recién monitoreaba los medios impresos, en donde los de sucesos coincidieron con la fotografía principal y con distinto criterio en el titular de la misma noticia, cuando me entero por la inmediatez de la radio y las redes sociales que 19 personas habían fallecido y más de 40 quedaron heridas, producto de un accidente provocado por un autobús de una de las empresas más antiguas en el transporte colectivo, que de San Marcos viaja a la ciudad capital.

Las causas son por alta velocidad, sobrecarga de pasajeros, fallas mecánicas, falta de precaución en una curva, etcétera.

Cualquiera de las citadas recae en la irresponsabilidad, más cuando se sabe que de uno dependen varias vidas a abordo. Lo primero como piloto responsable es verificar y estar convencido que el automotor está en perfectas condiciones, luego la prudencia a la hora de conducir, eso incluye lo demás, porque en carretera una piedra, bache o perro travieso, puede ser causa para un giro de timón inesperado que puede hacer perder el control si la velocidad es excesiva.

Ahora no se puede decir que no hubo llamados. Las emisoras, canales de televisión, medios impresos y redes sociales sirvieron para multiplicar mensajes de sensibilidad para los viajeros. Se establecieron campamentos antes y durante la Semana Santa, por lo visto no fue suficiente para evitar las desgracias que ocurren en esa operación o plan retorno, como lo han llamado, y que concluye con ese titular, “un trágico retorno”. Tristes escenas se han vivido en las carreteras de Guatemala.

No se trata de culpar, todos tenemos algo que ver, somos una sociedad que le falta prevenir y exigir para no lamentar. Somos cómplices de situaciones repetitivas. Si sabemos que eso ha pasado, porqué insistir nuevamente en lo mismo, por qué arriesgar su vida, a sufrir consecuencias. Hasta que nos unamos y velemos unos por otros, dejaremos de sufrir de manera severa y absurda, en hechos distintos, pero similares.

Autoridades, cuerpos de socorro, medios de comunicación y algunos guatemaltecos, cumplieron con la prevención, alertas y alarmas para evitar desgracias. Somos nosotros los humanos, los que conducimos vehículos, quienes no contribuimos con evitar accidentes, lo que no queremos entender es que manejar vehículo requiere concentración, prevención, habilidad, destreza y excesiva responsabilidad en sus actos. Mientras no nos unamos y actuemos con responsabilidad, seguirán pasando hechos, como ese lamentable suceso del kilómetro 160 en territorio de Nahualá, Sololá.

Deja un comentario

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos relacionados

Sin categoría

Indígenas tienen más alta letalidad en cáncer de mama

Vicepresidenta participa en presentación de informe realizado por Flacso

Sin categoría

La recta final en la lucha por la Casa Blanca

Las elecciones presidenciales de los Estados Unidos constituyen un complicado proceso, cuyo...

Sin categoría

Empleados del Gobierno, en huelga

Trabajadores se movilizan en Argentina para impedir que los grupos empresariales usurpen...

Sin categoría

Consulado realiza primera Feria de Recursos y Negocios en Los Ángeles

Personal del Consulado General de Guatemala en Los Ángeles, California, Estados Unidos,...