Con la ampliación de Q10 millones a su presupuesto, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) espera enfrentar las eventualidades que pudieran suscitarse en lo que resta de la época lluviosa.
De acuerdo con el titular de la entidad, Sergio García Cabañas, los fondos se utilizarán para la compra de raciones de alimentos e insumos, y así brindar auxilio de forma eficiente a la población ante un suceso.
El incremento fue autorizado por el mandatario Jimmy Morales, quien el lunes en consejo de ministros declaró estado de prevención en todo el territorio, principalmente en las zonas de riesgo, como asentamientos, desembocaduras de ríos, cuencas, zanjones y quebradas, con la finalidad de prevenir tragedias.
Acerca de la norma
La medida está contenida en el Acuerdo Gubernativo 5-2016 y permite a las instituciones a cargo del tema accionar inmediatamente para apoyar a las personas que ya fueron damnificadas por deslaves u otros incidentes provocados por las precipitaciones, y para evacuar a quienes todavía viven en áreas vulnerables.
Según el vocero presidencial, Heinz Hiemann, “la intención del Organismo Ejecutivo es adelantarse a los acontecimientos, para no tener que lamentar la muerte de guatemaltecos”.
La normativa tiene una vigencia de 15 días, y una vez finalizado el período el Congreso tendrá que conocer un informe circunstanciado de los hechos ocurridos y lo ejecutado para atender a los perjudicados, pues así lo establece la Ley de Orden Público.
“Aunque existen unos 8 mil 200 puntos en peligro, estamos trabajando con las autoridades locales para identificar y priorizar los más propensos a sufrir daños por el exceso de humedad en los suelos y la crecida de afluentes”, dijo García Cabañas.
En seguimiento a estas acciones, delegados de la Conred se reunieron ayer con gobernadores departamentales y jefes ediles para discutir y estudiar los planes de respuesta que se deben implementar en caso de ser necesario, lo cual incluiría la apertura de albergues, entre otros aspectos.
Por su parte, el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología emitirá informes sobre las condiciones de las barras, bocabarras y corrientes de agua, lo cual facilitará hacer una estimación de la saturación de agua en la tierra y para dar aviso a los habitantes de lugares en los que se podrían registrar deslizamientos.
Edwin Escobar, alcalde de Villa Nueva y presidente de la Asociación Nacional de Municipalidades, opinó que estas medidas son importantes, principalmente para el bienestar de los vecinos de escasos recursos.
Deja un comentario